-Pasar una tarde con nuestros hijos y sus compañeros de clase.
-Conocer al resto de padres y madres con los que no coincidimos normalmente.
-Que los niños pasen una tarde de invierno jugando con sus amigos ya que no pueden salir al parque debido al tiempo.
Y por segundo año cumplimos todos esos objetivos. La asistencia es masiva y los niños se divierten con sus familias y amigos, cosa que no suele ocurrir a diario. También este año la respuesta de los padres ha sido grande y ha superado las expectativas del AMPA que casi se queda corta con los refrescos y batidos, todos los niños recibieron el regalo del AMPA, que consiste en un libro para fomentar siempre hábitos educativos en los regalos. Este año el AMPA ha decidió llevar los dulces que sobraron a Cáritas que realiza una tarea de reparto de comida a aquellos que mas la necesitan.
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